Juegos de fiesta

Juegos de fiesta: actividades para amenizar la velada

La persona que organiza la fiesta suele tener un largo dolor de cabeza porque no sabe en qué ocupar a sus amigos. Comida deliciosa, buenas bebidas, discusiones. Más tarde, el tiempo se alarga. Para evitar el aburrimiento, se puede invitar a los amigos a jugar a juegos de mesa. Los juegos de fiesta son aventureros, adictivos y provocan muchas risas sinceras.

Juegos de fiesta: cuando la comida no es suficiente

Juegos de fiesta: ¿a cuál jugar?

Los juegos que generan más revuelo y risas son aquellos en los que las cartas te animan a describir algo: Dixit, Alias. A veces las descripciones son totalmente inesperadas. Pueden revelar las emociones de las personas, rasgos de su carácter... una forma estupenda de conocerse mejor.

Jenga o Torre es otro juego adictivo. Se trata de juntar las piezas para evitar que la torre se derrumbe. Cuando tiras de los dados con mano temblorosa, ya no queda mucho por hacer y, de repente, la torre se convierte en una torre, haciendo reír a todo el grupo. El juego se repite muchas, muchas veces porque quieres ganar siempre.

Jenga - el juego en el que no puedes derribar la torre

¿Quieres moverte durante la fiesta? Entonces deberías elegir el juego Twister. Es un juego en el que los jugadores entrelazan sus brazos y piernas, e incluso se empujan unos a otros. La idea es mover la pierna o el brazo hacia donde apunta la flecha del juego, que es retorcida por uno de los jugadores de la fiesta.

El Monopoly es un juego fácil, con mucha aleatoriedad en el número de dados que se tiran. Si no te apetece darle vueltas a la cabeza en las fiestas, pero quieres jugar a algo, ésta es una buena escapatoria. Es importante no enfadarse si no se consigue la carta que más se desea.

Monopoly: un sencillo juego de mesa para fiestas

Fiestas de juegos de mesa: ¿qué son?

Algunas empresas organizan fiestas sólo para jugar juntos a juegos de mesa. Para estas reuniones, eligen juegos más difíciles, con uno o más juegos que ocupan toda la tarde. Cuando el entusiasmo se apodera de la gente, las fiestas pueden durar hasta la madrugada. Es una gran oportunidad para socializar, aprender nuevos juegos o reforzar el conocimiento de las reglas.